la lágrima engañosa…nunca se sabe de donde viene pero si por qué sucede… más bien… no sentía nada cuando sólo pensaba en llorar. La acción concreta de que, por mis ojos pasara un líquido que pudiera limpiar mi visión sobre las cosas… pero vaya que eso es un error… más que poder "ver" mejor… sentí mejor….estaba más vulnerable que de costumbre, sentía en los poros el correr de las ganas… de esas de hace tiempo.
"escribir sobre lo que alguna vez se escribió y predijo en el texto del olvido… escribir por escribir, con aliento y sudor, con cerveza y ron, con amor y con sexo… escribir… en el cuerpo"
Voces dispares comenzaban a hacer monólogos dentro de mis venas, y sólo podía correr en ellas, más bien corría yo, con una mayor imprudencia de lo que suelo hacer, las palabras se conectaban y no dejaban que yo pudiera hilar apenas un enunciado, había decidido pronunciar el pensamiento bajo el cemento de las paredes….
No era algo nuevo, pues ese sentimiento habría sido de el, y de ella, y de todos cuando se siente uno más sensible, como niña bajo la cama, guardé la llave que podría abrir mi boca… pero entre en hundimiento de los pasos, comenzó la danza del beso… se olvidaron todos de todos… y sólo quedó el silencio gritón.
EL SUEÑO, los sueños, las pesadillas y la familiaridad comenzaron a verse en el espejo, queriendo uno de otro la aceptación, y se callaron, se gritaron… se esfumaron por la mañana con la ducha…
¿mañana?
….creerás que he hablado de ti, de la ausencia que dejaron los espantos, de las pesadillas, pero no es así, hablaré de las cicatrices añejas, aquellas que de tiempo habían ya "ultrajado" mis pensamientos…
mañana!!! será especial.. será el aniversario veinte, de donde se sitúan las cicatrices de las que hablo, de quien las dibujo de tal manera que su trazo se asoma.. y la lágrima engañosa vuelve, es realmente la verdad de lo que se siente por esa ilusión, y cuando volteo, vuelves a mirarme, se me hunde el corazón, y vuelvo a callar, callándote… una vez más…. lejos… llenando esos vacío con larvas que devoran los gritos que solo pueden buscarte… feliz. feliz mañana, sin mañana…
que bueno es cruzar la mirada, y volver a cruzarla cuantas veces se quiera, no es un adiós, lo sé, pero tampoco será un hasta pronto.
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