carta a una madre después del TAB Y TLP

No sé que decirte o como comenzar esta carta.

No han sido fáciles los días desde hace meses, y lo supiste. La verdad es que sé muy bien que desearías quizá una hija "más normal" que pudiera quedarse quizá más quieta, siempre me gustó hacer muchas cosas raras, pero finalmente pasaron muchas cosas que no lograba ver, como cualquier niña tuve una infancia, y agradezco que gracias a que tú decidiste regresar con tus papás, yo tuve un papá y otra mamá, me tocó ganar, mientras tu trabajabas, sé que la última vez, te reclamé por eso, pero tuviste la sinceridad de confiar en tus papás, e hicieron un buen trabajo, pues de ahí vino mi inspiración por enseñar (cosa que descubrí recién en terapia) y me puso muy contenta. Por otro lado, también gracias a tu gusto por vestirte bien, oler bien, y arreglarte, tengo un estilo, también quizá muy diferente, pero es algo que me gusta hacer, entre otras tantas como la locución, que es algo que también hiciste y yo también. 

Con todo esto quiero decirte que no nacemos sabiendo existir, aprendemos con lo que la vida nos va dando, a veces feo, a veces menos dificultoso, pero siempre estamos aprendiendo, llenos de marcas de la vida, que finalmente traen frutos, o al menos eso creo. 

Pese a que tú y yo somos muy diferentes, tenemos en esencia las mismas cosas porque luchar, y aunque son épocas distintas, soy y trato de ser una mujer independiente, que pueda lograr por si misma, lo que quiere, y eso es gracias a que tu, a tus formas lo has hecho, y mírate dónde estás, jubilada, con una casa, bueno dos, y un montón de gente que te quiere. Sé que tuviste una gran batalla para llegar a mi, no sé como lograste reponerte de tanto duelo, uno tras otro y sobreponerte con la ilusión de un hijo, nunca la entenderé, pero seguro por mi parte, hay admiración y respeto, ya que esa determinación hizo que al final llegara, naciera, no estoy segura en realidad qué se hace con la vida aún, y tenerme significaba dejar al amor de tu vida, que siempre, siempre, has hablado bien de él, aunque no le veo que se haya esforzado tanto a ponerse en contacto. 

Has dedicado tu vida al trabajo, y estar en el presente, sé que no ha sido fácil muchas veces, pues extrañas a tus papás, pero al menos dentro de todo, hay uno que otro de tus hermanos, y hermanas que también se acompañaron, y se acompañan, la vida es dura, y pese a eso, te ha sobrepuesto, y has estado para mi, también has dejado de hablarme por un tiempo cuando creías que hacía las cosas mal, y no lo entendía, pero al final regresas, obviamente ves en mi las cosas como una especie de defectos, si es así, tengo miles más que tú, pero los parámetros siempre serán diferentes. Seguramente piensas que estando contigo no me pasará nada, pero la vida es un riesgo, y vivirla ya es ese riesgo, estoy mejor cada día, y estoy tranquila porque de alguna manera, ahora si pudimos hablar de cosas más a fondo aunque sean dolorosas y vernos a los ojos para poder desenmarañar las cosas que vivimos de tiempo atrás y estar mejor, con claridad en la vida, y sobre todo con amor y respeto. 

Gracias por hoy ser mi mamá, una que también aprende siempre con su hija, una hija que trata de estar bien para el mundo, aunque este mundo a veces parezca que no vale la pena, ahí estas al pendiente, todos los días, porque es lo único que puedes pensar, y tampoco lo entenderé porque al final, tener un hijo, sólo se entiende de esa manera, pero aún pese a que quizá no te pueda entender al 100, te agradezco por ser mi mamá, esa que luchó interminablemente por una maternidad, y que al final lo logró y sigue siendo una persona integra, que tiene claro lo que quiere y tiene en este mundo.

Mamá, te mereces el mundo, y aunque yo quisiera que fueras tú la que conozca el mundo, trato de compartirte lo que hay en él, desde mis ojos... con mi expos, con mis vídeos, con la música, con los viajes, no sabes lo bien que se siente viajar, conocer, etc. 

Espero poder seguir compartiendo contigo estas experiencias que aunque sean diferentes, son parte de mi, para ti. Te quisiera regalar tranquilidad de que estoy bien, porque ahora no puedo darte mayores cosas.. pero aquí estoy dándote un abrazo a la distancia muy grande y mandándote fotos del Benito, que es un gato adorable, eso es mi regalo, humilde, pero de corazón.

Te amo, y admiro tu manera de ver el mundo con convicciones firmes.

ATTE. MARISOL